Esta vez lo que me deparaba el
destino no ha sido algo bueno. El martes 24 de septiembre me confirmaron lo que yo
ya sospechaba. Esta vez mi situación de desempleada no iba a llegar a su fin con
la estación estival. Sí. Llegué a la cola del paro en junio, y ahora no sé cuando la dejaré.
La sombra del desempleo siempre ha
estado presente en mi vida laboral desde el primer momento en el que comencé a
trabajar en el año 2 004 en Televisión Municipal de Córdoba. Siempre he tenido
contratos temporales. Al principio de mi carrera, eran de
septiembre a julio. En los últimos tiempos el periodo laboral se ha ido acortando.
Volvía a producir reportajes, a grabar, a visionar, a redactar… en octubre y
finalizaba en junio. Mi situación laboral se puede decir que siempre ha sido
precaria, pero aún así daba y doy gracias por haber tenido trabajo de forma
casi ininterrumpida desde 2004 hasta junio de 2013 en un sector como el
periodismo. Según el “Observatorio de la Crisis” de la Federación de
Asociaciones de Periodistas de España, FAPE, desde noviembre de 2008 a la actualidad más de
10.000 periodistas han perdido su puesto de trabajo. Sin duda, 2012 puedo
afirmar que fue un año negro para los profesionales de la comunicación, ya que más de 5.270
vieron como eran expulsados del mercado laboral. Y más de 80 medios de
comunicación han echado el cierre. El panorama no es nada halagüeño
Posando con el Premio Universidad de Sevilla dedicado a los 10.000 periodistas que han perdido su puesto de trabajo |
El año pasado ya estuve a punto de vivir esta situación. De hecho, recogí junto con Mai Mancheño, Enrique Millán y Emilio Castro un premio simbólico de la Universidad de Sevilla en la modalidad de Periodismo, con el que la instituación quería rendir homenaje a los periodistas que habían sufrido en sus carnes un despido, con el fin de denunciar la maltrecha situción que atraviesa nuestro sector. Así que a pesar de que sabía que este día tarde o temprano llegaría, no puedo dejar de
reconocer que es un golpe duro. Me resulta difícil imaginarme así mucho tiempo. Quienes
me conocen saben que soy un culillo de mal asiento. Mi cabeza va a mil por
hora pensando en todas las cosas que tengo que hacer para que este paro sea
productivo, y sobre todo, corto. Para ello, necesito de vuestra ayuda.
Si os enteráis de que en algún sitio necesitan incorporar a una persona joven,
dinámica, trabajadora, con ganas de seguir aprendiendo y creciendo
profesionalmente no dudéis en avisarme.
Mientras tanto, aprovecharé el
tiempo que esté en esta situación para ampliar mi formación, para abrir
mi mente y mis ojos a nuevas oportunidades, porque así es la vida, y como dice el último single de Marc Anthony, hay que vivirla y de la mejor manera posible. Os dejo el video clip de "Vivir mi vida", así es como se llama la canción, para poner algo de ritmo, alegría y optimismo a estos días grises que estoy viviendo.