Se celebra en Córdoba "No More Suits"

Hola esta semana os voy a hablar de “No More Suits Córdoba”. Si os preguntáis qué es, ahora mismo os lo voy a contar.

“No More  Suits” es un evento que nació en Cádiz, con el objetivo de facilitar el networking entre los emprendedores y trabajadores, sobretodo del sector tecnológico (pero no exclusivamente de éste), y profesionales de distintos ámbitos de la empresa y del marketing. Son muchos los aspectos novedosos de este encuentro profesional, y que lo diferencia de cualquier otra iniciativa de networking. Uno de ellos es el lugar de celebración, un bar, ya que se trata de hacer negocios y compartir experiencias profesionales pero en un ambiente distendido. Otro, y muy importante teniendo en cuenta los tiempos que corren, es que  es gratuito. Sólo pagas lo que consumes. Otro aspecto importante es que te brinda la posibilidad de  conocer la experiencia de otro emprendedor o emprendedores,  y además, si tienes una idea o proyecto empresarial en fase inicial o no sabes cómo lo puedes poner en marcha personas expertas del mundo de la empresa, del marketing ... te asesoran de forma individualizada.

¿Cómo funciona?

Tiene una dinámica muy sencilla. Durante los primeros 30-40 minutos tiene lugar la presentación de un proyecto innovador. En esta ocasión, vamos a tener la suerte de conocer a Interlight sp, una empresa creada por José Carlos Ruiz Cuenca y Jerónimo Jiménez, con la que han desarrollado el primer paso de peatón cuyas losas blancas se iluminan automáticamente al acercarse un viandante.

Cartel anunciador de "No More Suits"

A continuación, tiene lugar durante 50 minutos el Speed Mentoring. Yo esta parte la comparo con el juego de la silla. Ahora entenderéis por qué. Cinco personas, que bien tienen un proyecto desarrollado en su fase inicial o sólo cuentan con una idea pero no saben cómo convertirla en una realidad, se sientan durante diez minutos con un mentor, persona experta del mundo de la empresa, el emprendimiento, el marketing..., que intentará resolverle las dudas que tenga y orientarle en la aventura de emprender. Pasados estos diez minutos el emprendedor cambia de silla y de mentor, y así hasta que pasa por los 5. En total, son 50 minutos en los que recibe asesoramiento gratuito. De momento, nuestros mentores son Baldomero Gas, Gerente de Bodegas Mezquita, David Merinas, fundador de Deidos Estudio, Miguel Ángel Calero Fernández, fundador de Planem y creador del espacio de co working Cosfera y María Ángeles Puerma Consultora de Marketing, Formadora, Community Manager y Social Media de APC Marketing entre otras empresas.

Y ¿mientras esto tiene lugar, el resto de los asistentes qué hacen? Pues networking. Se conocen, conocen sus experiencias emprendedoras, intercambian sus tarjetas pero todo esto con una coca-cola, cerveza en la mano o lo que a cada uno le apetezca. Sin formalismos.

En definitiva, de lo que se trata es de que amplíes tu red de contactos de una forma divertida y sin chaquetas, de ahí el nombre del evento “No More Suits”, en español sería “No más trajes” “No más chaquetas”.  La cita es el 7 de Noviembre a las 19 horas en Bodegas Mezquita. El evento tiene una duración aproximada de dos horas. Está abierto a cualquier persona emprendedora que quiera recibir feedback y ampliar nuevos horizontes. Más información en www.nomoresuits.es. Síguenos en facebook, www.facebook.es/NoMoreSuitsCordoba y en twitter @NMSCordoba. 

Os dejamos este reportaje que el programa Andalucía.es realizó el pasado abril a "No More Suits Cádiz", para que os hagáis una idea de cómo se desarrollan estos encuentros.  

Lo prometido es deuda

Hace un par de días os dije que os iba a contar dos experiencias que había tenido en mi proceso de búsqueda de empleo. Al final, opté por compartir sólo una de ellas. El post se me hizo demasiado largo, y no os quería aburrir. Pero lo prometido es deuda. Y, aquí estoy para contaros cómo me fue en la entrevista que tenía concertada para Comercial de Café. 

Desde el primer momento en el que recibí la llamada del gerente de la empresa, mis alarmas se encendieron. Primero por el tono y cómo se dirigió a mí la persona que estaba al otro lado del teléfono. No sé cómo explicarlo. Pero, era como si el que estuviese al aparato no fuese un profesional que está concertando una cita con una candidata a un puesto de trabajo, sino como si fuese mi padre, un familiar o cualquier otro conocido mío. Al descolgar me dice "¿Olga?" Digo "sí". "Soy ...(no voy a escribir su nombre para preservar su intimidad) de la empresa tal. ¿Tú has manado un curriculum para vender café? Pues café no es lo que vas a vender. Si puedes te pasas mañana a las 18.30" en tal dirección.  Me quedé un poco desconcertada, porque si la oferta publicada en Infojobs era "Se buscan comerciales", y ahora el señor me decía que no era exactamente eso, ¿entonces, para qué era?. Tan desorientada me quedé tras la llamada, que le dije a mi marido que me acompañara hasta el lugar de la entrevista. Aceptó. Obviamente, él se quedó en el coche esperándome. Pero yo estaba tranquila. Sabía que si lo necesitaba, él estaba muy cerca. Para mí la situación que viví fue surrealista. No me harían ninguna entrevista de trabajo, directamente me proponían formar parte de un negocio.

Esta imagen representa cómo es el esquema de una empresa multinivel

Me invitaban a formar parte de una empresa multinivel. Quizás os preguntéis, ¿qué es una empresa multinivel? Os lo voy a explicar con un ejemplo de una marca conocida por todos, y sobretodo, por todas. Avon sería una empresa multinivel. Tú te haces vendedora de Avon. Le vendes los productos a tus amigas o conocidas. Por estas ventas tú te llevas una comisión, pero si una de tus clientas decide  hacerse vendedora, entonces tú te llevas una comisión extra, por haber conseguido una nueva distribuidora, si en lugar de una consigues 5 más, tus ingresos van creciendo exponencialmente. La diferencia radica que en esta ocasión, el producto a comercializar no eran maquillajes, sino un café con extracto del hongo ganoderma. ¿Vosotros habías oído hablar alguna vez de este hongo? Yo jamás. Pero cuando llegué a casa lo primero que hice fue buscar información al respecto, y se supone que este hongo oxigena el cuerpo, mejora la circulación, refuerza el sistema inmunológico y ofrece longevidad. Además de otras innumerables propiedades curativas. Vamos, ¡una maravilla para nuestra salud! Lo que el señor me ofrecía a mí y al chico que también había citado conmigo, era participar en la empresa de tres formas: una, aportando 250 euros, y teníamos que vender 9 paquetes de café, otra con 500 euros y venderíamos X paquetes y la tercera con 1.440 euros y la cantidad de paquetes de café que tendríamos que vender para recuperar la inversión sería mayor. Pero gracias a la venta directa de este milagroso producto obtendríamos unas ganancias de entre el 50 y el 500 por ciento de lo invertido, según este señor. ¿Qué os parece el planteamiento? ¿Vosotros veis el negocio? Porque como me dijo el hombre, “esto lo ves o no lo ves, cuanto más tiempo tardes en entrar, más dinero estarás perdiendo”. Yo no lo vi el viernes pasado, y continúo sin verlo. Así que de momento, sigo con mi búsqueda de empleo y enrededa en mil historias que ya os contaré.

Trabajos ...

Desde que me comunicaron que no me volvía a incorporar al programa en el que he estado trabajando como redactora y locutora durante los últimos nueve meses, inicié mi búsqueda activa de empleo.

Son muchos los portales que existen en Internet para este fin, y no es tanta la variedad de ofertas que encuentras.

Si entras en cualquiera de ellos, verás que, sobretodo, lo que abundan son empresas que buscan comerciales. Como soy periodista y casi toda la experiencia laboral que acumulo es en el sector del periodismo y la comunicación pienso que puedo desempeñar bien este trabajo. Según se especifica en las ofertas, los requisitos que deben cumplir un comercial es que sea una persona que sepa comunicar, dinámica, amable, constante y que tenga don de gentes. Todos los cumplo. Así que me postulo para aquellas ofertas de empleo, en las que pienso que encajo y que me gustaría desarrollar, como pueden ser las de comercial o promotora de productos.

La semana pasada me llamaron para realizar tres entrevistas para comercial. De las tres os voy contar cómo me fue en dos de ellas.

La primera para la que fui llamada era de una oferta en la que indicaban que necesitaban comerciales para la campaña Otoño-Invierno. No especificaban mucho más. Así que fui sin saber muy bien para qué era. La persona que me entrevistó era un chico joven. Él ya me explicó que se trataba de una empresa que buscaba “captadores” para diferentes ONG`s, entre ellas Intermon Oxfam o Save The children. Me contó que ellos no salen a la calle a parar a la gente a “salto de mata”, sino que ellos por la mañana visitaban empresas, y por la tarde domicilios particulares con el fin de conseguir personas que se hagan socias de algunas de estas organizaciones. A la media hora o así de haber salido de su despacho, recibí una llamada en la que me comunicaban que había pasado al siguiente proceso de selección. Tenía que personarme a la mañana siguiente en el mismo lugar. Llegué a la hora acordada. A las doce del mediodía. Me presentaron al que sería “mi coordinador” esa jornada. El chico me invitó a tomar un café, y mientras nos lo tomábamos, me explicó en qué consistiría el trabajo. Ese día me tenía que ir con él y dos chicas más a Coria del Río, un pueblo de Sevilla. A partir de las 14 horas visitaríamos los domicilios de los vecinos de este municipio para conseguir que se hicieran socios de Intermon Oxfam. Allí estaríamos hasta las 21.30 horas, que regresaríamos de nuevo a la oficina en Sevilla. Él fue quien me detalló las condiciones laborales y económicas. Os la resumo. Según la persona se hiciese socia de Intermón Oxfam por 15, 18, 21 o 24 euros al mes mis comisiones serían de 40, 48, 52 o 60 euros respectivamente. Además, si conseguía que en una semana se hicieran socios 20 personas la empresa me premiaba con 100 euros, y si eran 30 con 200. Si lograba 6 firmas en una semana, pasaba de Distribuidora (que era lo que iba a ser de primeras) a Coordinadora de Equipo, que es lo que él era, y tenía a su cargo a tres distribuidoras, que ese día iban a ir a “saco” a captar nuevos socios porque estaban luchando para ascender a Coordinadoras, y si alcanzaban el objetivo fijado, él pasaría a ser Jefe de Equipo, con lo que sus ingresos se verían aumentados. “Lo bueno de este trabajo, es que tienes la oportunidad de ascender en muy poco tiempo. Yo llevo 8 meses y medio, y ya estoy luchando por ser Jefe de Equipo, y después, podré tener mi propia empresa” me dijo. Me señaló que “otra cosa buena es que todos los días recibimos formación. Nosotros quedamos en la oficina a las 11, y de 11 a 12 nos forman. De 12 a 13.30 comemos y nos desplazamos a nuestro radio de acción, y a partir de las 14 empezamos a llamar puerta por puerta para captar nuevos socios hasta las 21.30 de la noche”. Me había hablado del horario y de las condiciones económicas, pero no me había dicho nada sobre la relación contractual. Entonces, le pregunté cuál era. “La empresa te hace un contrato mercantil. Y, tú te tienes que hacer autónomo, que ahora la cuota de los 6 primeros meses es de sólo 50 euros”.  Había muchas cosas que no me cuadraban. La primera, no pienso que sea fácil captar socios para una organización solidaria en estos tiempos, pero menos aún, si vas a casa de la gente a la hora de comer, o cuando han salido de trabajar a las 17.30 o 19.30 de la tarde. Me puse en el lugar de estar yo en mi casa a la hora de comer o después de un intenso día de trabajo, y que viniese alguien para venderme que me haga socia de una ONG. Sinceramente, muchas ganas de escuchar a un promotor no iba a tener. La segunda, el hecho de tener que hacerme autónoma, pero que en realidad, sólo iba a trabajar para esa empresa en cuestión, porque me fijaban un horario de 11 a 21.30 horas. Mientras, nos dirigíamos para coger el coche, iba dándole vueltas al asunto, si me iba a merecer la pena invertir mis energías y tiempo en un trabajo de estas características, y como no lo veía claro, y además, ese día a las 6 de la tarde tenía cita para realizar otra entrevista, le dije al coordinador que le agradecía mucho su tiempo, y que me lo hubiera explicado todo tan bien, pero que no me iba a ir con ellos a Coria porque no estaba convencida de que fuese a aceptar el trabajo, además, que tenía que estar en Sevilla a las 18 horas. El chico me dijo que no pasaba nada, y me deseó suerte.

Lo que dio de sí, la entrevista que tenía os lo relato en el siguiente post, para no hacer este tan extenso :).